✔ 🟢 El hábito de ganar y sacar provecho de todo (aunque afecte tu salud y tu peso).
El hábito de ganar y sacar provecho de todo (aunque afecte tu salud y tu peso).
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Como seguramente comprenderás, todos buscamos nuestro beneficio y el de los nuestros, ya sea mediante acciones que dignifiquen nuestro actuar en sociedad o en algunos lamentables casos, mediante acciones que perjudiquen a alguien más, a esto le llamamos comúnmente tener el hábito de ganar.
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Éste hábito ganador, aunque no siempre sea digno de orgullo, ya que algunas personas buscarán ganar mediante trampas o engaños (por ejemplo, los políticos), nos lleva a reflexionar en otras perspectivas más modernas, de tal forma que se fomente el hábito de ganar-ganar, es decir, que ambas partes o personas involucradas cedan algo para que todos salgan con el mejor posible beneficio, con ello dignificamos nuestro hábito ganador sin perjudicar a alguien más.
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¿Pero qué pasa cuando el hábito de ganar se vuelve en perjuicio de ti mismo?
Por muy sorprendente que parezca, hay cierta incredulidad el pensar que exista una persona que sea capaz de afectarse a sí misma con el fin de “ganar”, en este caso hablaremos de la salud y del peso, sin embargo, aunque en primera instancia parezca absurdo, éste hábito de ganar perjudicándote es más común de lo que crees.
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Lo vemos por ejemplo cuando nos ofrecen una promoción o “producto gratis”.
Recuerda nada es gratis en este mundo y a un lado existe el mismo producto al mismo precio, pero con la presentación anterior, es decir, la que aún no tiene la promoción o el producto gratis, te apuesto lo que quieras a que elegirás el que “tiene más” por el mismo precio.
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Muy similar cuando vamos a comer a la fondita.
Si tenemos dos opciones y en ambas fonditas es el mismo costo, tendemos a ir a donde sirven más cantidad para “aprovechar el costo”, ya que en esta fondita además de servir más, te dan más tortillas o pan, más agua de frutas, más postre, más arroz, más frijoles, etc.
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En otras palabras, te sirven mejor y por ende, en este afán o hábito de ganar, terminas comiendo todo y hasta te tomas la última gota de agua o refresco que te dieron para aprovechar mejor tu dinero, a pesar de haber podido quedar satisfecho con la mitad de lo que comiste, sufriendo por consecuencia el incómodo “mal del puerco”.
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Otro caso es cuando vamos a un buffet.
Nos atascamos o atracamos de todo, creyendo que el restaurante o empresa que ofreció dicho servicio, “saldrá perdiendo con nosotros” ya que tendemos a tratar de aprovechar el costo del buffet para darnos la sensación de que ha valido la pena, aún, aunque termines con la indigestión e incomodidad el resto del día, en el peor de los casos, haciéndote gastar aún más por la consulta médica y los medicamentos necesarios para aliviarte de dicho abuso y malestar o infección estomacal que te provocaste por tu hábito de ganar en los buffets.
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O simplemente cuando vas al puesto de tacos y te preguntan si “con todo”.
Pues si, si estamos pagando, por qué no aprovechar (hasta lo que no se antoja comer), así habrá gente que vaya con la intensión de comer tacos y termine comiendo más papas fritas o cebollas fritas, en el mejor de los casos, te pondrán frijoles, pepinos, jícamas, salsas y cebolla cruda, lo cual tenderemos a ponerle “de todo” solo porque está disponible y “es gratis”, es decir, ganamos más cosas por nuestro dinero.
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No se diga de cuándo vamos de vacaciones a un Hotel All Inclusive.
La mayor parte de las vacaciones nos la pasaremos tragando y bebiendo, es decir aprovechando o “ganando” más por nuestro dinero, a tal punto de no disfrutar de las mismas o perderte el paseo para conocer el atractivo turístico o la ciudad por quedarte a ganar o aprovechar el All Inclusive.
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Con la consecuencia que te la pasarás en la incomodidad total de la pesadez del desayuno buffet, pero sin dejar pasar la hora de los snacks, para llegar a la hora de la comida y/o cena (también buffet) sin hambre, pero con la intención de “seguir ganando” o aprovechándose de dicha facilidad de comer todo lo que puedas y hasta lo que no puedas (ganando peso, por si fuera poco).
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No se diga de las bebidas alcohólicas, habrá gente que ni siquiera visite el mar si están en un sitio de playa, todo por no descuidar su lugar en la barra de bebidas, peor aún si esta barra está dentro de las albercas de los hoteles, imagínate, tanta bebida y no ves moverse a esas personas ni para ir al baño, me pregunto (inocentemente) entonces ¿Dónde harán sus necesidades fisiológicas para seguir tomando sin parar?
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Supongo que después de éstos ejemplos, ya te imaginarás a dónde voy con el hábito de ganar, aunque afecte tu salud y tu peso ¿verdad?
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Pues como verás, son hábitos que tenemos tan arraigados que no nos damos cuenta que realmente perdemos al “ganar” o sacar provecho de algo.
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Tenemos tan arraigado el hecho de que ganar es aprovechar mejor el dinero, que, bajo ésta perspectiva, poco nos importa si al “ganar algo” económicamente hablando, afectamos con ello nuestra salud y nuestro peso, siempre y cuando nos quedemos con la percepción de que aprovechamos mejor nuestro dinero y sacamos provecho de la situación.
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Por esta razón es que la industria alimentaria se ha aprovechado de nosotros como consumidores, a tal grado de considerarlas “estrategias de venta”, el aparentar “regalar” más producto, hace que se venda más y por ende ganar más, así se compensa la aparente pérdida que tuvo la empresa al regalar algo.
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Ésta estrategia también es utilizada por los vendedores más sencillos y comunes, por ejemplo, el “regalar” la prueba de algo, hace que, además de despertar tus papilas gustativas y en ciertos casos la adicción a comer, también aclaman psicológicamente a tu generosidad, con el fin de comprarle algo a esa pobre persona que está perdiendo dinero al regalar la prueba, por lo que te sientes con el compromiso de comprarle algo.
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Por ello, el hábito ganador nos lleva a engordar cada vez más y normalizar la situación, a tal grado de ser un factor más en el ambiente obesogénico en el cual estamos inmersos y en algunos casos, nos cuesta más trabajo salir del mismo, ya que siempre estará la tentación de “ganar” el doble de producto por unos cuantos pesitos más.
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Muy a mi pesar, ya que, para serte sincero, en muchas ocasiones también caigo en la tentación de desarrollar mi hábito ganador y aprovecharme de la situación, te recomiendo lo siguiente para evitar que te afecte la salud y tu peso:
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Ve de compras sin hambre y con una lista previa de lo que necesites comprar:
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Con este hábito, difícilmente te distraerás en deambular por otros pasillos para ver que se te ocurre comprar o que te falta, para colmo, si vas con hambre, te garantizo que pensarás que te falta todo lo que veas y terminarás comprando unas cuantas cosas innecesarias que, por oferta o promoción, te hicieron comprar de más, para finalmente afectar tu salud y tu peso al pensar que ganaste o ahorraste.
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Por ejemplo, al comprar 2 o 3 promociones de galletas al 3x2, algo que definitivamente puede ser innecesario para la despensa, pero terminas con 6 o 9 cajas de galletas disque para el año o el mes, donde te aseguro que no durarán ni una semana en tu despensa.
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Evita aceptar “probaditas” de lo que sea, aunque sean cosas aparentemente saludables como la fruta:
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Piénsalo un poco, es un alimento que no necesitas comer en ese momento, es más, te aseguro que ni siquiera se te antojaba previo a saber que había probadita gratis, recuerda que todo esto son estrategias de venta para comprometerte a comprarle algo que NO necesitas.
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Por otra parte, si lo necesitas por que viene en tu lista de compras, pues lo deberás consumir en el momento oportuno, no cuando a alguien más se le ocurra decidir por ti que debes comerlo, finalmente si lo compras es porque ya sabes a qué sabe ¿no crees?
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Por ejemplo, vas a comprar una piña para tus colaciones (algo saludable definitivamente) y te ofrecen la “probadita”, no la consumas, es para tus colaciones, ya sabes a qué sabe una piña, entonces cómprala y consúmela en el momento justo y en la cantidad correcta, de otra forma, terminarás comendo “muchas probaditas” sin dimensionar la cantidad real de lo que comiste, además, con el riesgo de abrirte el apetito y terminar comiendo otras cosas que si te van a afectar en tu dieta saludable (la probadita del chocolate, del taco, del chicharrón, del jugo mágico, del heladito, etc.).
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Puedes aprovechar las ofertas o promociones de producto gratis, siempre y cuando no te comas todo al mismo tiempo:
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En este caso, el ejemplo que se me viene a la mente son las donitas Bimbo, es muy común ver que el empaque clásico tiene 4 piezas y en ocasiones Bimbo se pone “generoso” y nos regala 2 más, pues si ya tenías la intención de comprar las donitas para tu colación en el día libre, pues cómpratelas, pero solo cómete la donita que tenías presupuestada para tu colación y guarda el resto para otro momento o días libres o para compartir a quien también se le antoje, no así para sabotear a alguien más para presionarle a que se las coma en tu lugar.
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Evita ir a los Buffets o algún All Inclusive:
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En caso de asistir a alguna de estas opciones, que te quede claro, hagas lo que hagas, ¡ya perdiste! No va a ver forma de que por mucho que te atasques, hagas perder al negocio en cuestión, recuerda que tienen perfectamente calculados los costos de todo y por ende los precios que deberán cobrar previamente para ganar, por ello, evítalos, no es negocio para ti.
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Si tienes necesidad de asistir a un restaurante para festejar algo, mejor asiste a uno donde tenga un menú diverso, así cada persona elige lo que quiere o necesita (sin pagar más de la cuenta).
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Por otra parte, si te encantan los beneficios de ir de vacaciones a un All Inclusive, pues adelante, pero no vayas con la actitud de querer “aprovecharte” del negocio, se selectivo en tus decisiones de consumo de alimentos y bebidas, saboréalas con calma y disfruta.
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Por ejemplo, si se te antojó algo más de lo que te serviste, piensa que seguramente al día siguiente ahí estará esa misma opción o en todo caso, sírvete muy poco de lo que se te antojó, así pruebas y no te quedas con culpa de no terminarte algo que no te agradó, presionándote a ti mism@ para terminártelo, recuerda que no tienes por qué abarcar o comer todo al mismo tiempo, es más puedes negociar con alguien de tu familia para compartir una de las opciones ¡y listo!
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Ya para finalizar, recuerda que el buen hábito de ganar, en ocasiones te puede hacer perder en otras cosas sin darte cuenta, siempre ten la filosofía de ganar-ganar, tanto en los negocios, pero más aún en tu salud y tu peso.
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Espero que bajo esta premisa de ganar-ganar, nos des la oportunidad de ayudarte a hacerlo, al mismo tiempo que tú nos ayudas a crecer y desarrollarnos como profesionales de la salud para hacer ganar en este caso salud a muchas otras personas, puedes comenzar ayudándonos a compartir esta información o en el mejor de los casos asistir a alguno de nuestros servicios en Sbel-T Forever, donde siempre buscaremos el beneficio mutuo.
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Por: Mtro. en Nut. Oscar M. Alanis
CEO Sbel-T Forever
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